La Paz | AnfYacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) se libra de un arbitraje, porque no hay relación contractual con Gulsby Process Systems, esta firma estadounidense ya fabricó la máquina turboexpander para la planta separadora de licuables en el campo Río Grande.
Gulsby "no puede" iniciar procesos legales contra YPFB o el Estado, "porque no tiene ningún contrato", aseguró el ministro de Hidrocarburos, Fernando Vincenti, al indicar que la justicia debe decidir si la empresa puede emplear el equipo que manufactura la firma estadounidense.
YPFB ni el Ministerio "somos una instancia judicial", por lo tanto, no pueden decidir si se empleará el equipo ya fabricado o si se contratará otro fabricante, remarcó la autoridad.
En días pasados, la petrolera estatal dio inicio al proyecto de instalar la planta extractora para Río Grande. Licitando los estudios y la ingeniería. Esta planta quedó trunca por hechos dolosos ocurridos en torno al contrato que YPFB firmó con Catler-Uniservice.Catler-Uniservice
La firma estadounidense fue subcontratada por Catler-Uniservice, justamente para fabricar el "corazón" de la planta separadora. Inclusive logró que YPFB abriera una carta de crédito irrevocable por 35 millones de dólares. De ese total se desembolsaron 13,3 millones.
Vincenti reconoció que con los fondos entregados, la empresa "ha construido partes de la planta por un valor, a decir de los informes que hemos recibido, aún mayor a los 13,6 millones de dólares entregados". Sin embargo, "el problema radica en que no podemos hacer" un desembolso adicional de un monto similar, agregó.
YPFB no puede incrementar los pagos a Gulsby porque se contravendría las normas en vigencia, remarcó el Ministro al recordar que cuando ejercía como Director de la petrolera estatal, les informaron que la compañía estadounidense fabricó el equipo contratado.
"Los informes que nosotros recibimos inicialmente indicaban que había las su ficientes condiciones técnicas", pero "el problema fundamental despué s radicó en la imposibilidad de orden normativo, de orden legal", puesto que "no podíamos pagar la exigencia que nos planteaba Gulsby".
La petrolera estatal no puede pagar "un monto equivalente a otros 13 millones de dólares porque no hay una relación, no había ni hay una relación contractual directa ente YPFB y Gulsby", remarcó el Ministro de Hidrocarburos al puntualizar que "éste ha sido el punto principal".
Gulsby "no puede" iniciar procesos legales contra YPFB o el Estado, "porque no tiene ningún contrato", aseguró el ministro de Hidrocarburos, Fernando Vincenti, al indicar que la justicia debe decidir si la empresa puede emplear el equipo que manufactura la firma estadounidense.
YPFB ni el Ministerio "somos una instancia judicial", por lo tanto, no pueden decidir si se empleará el equipo ya fabricado o si se contratará otro fabricante, remarcó la autoridad.
En días pasados, la petrolera estatal dio inicio al proyecto de instalar la planta extractora para Río Grande. Licitando los estudios y la ingeniería. Esta planta quedó trunca por hechos dolosos ocurridos en torno al contrato que YPFB firmó con Catler-Uniservice.Catler-Uniservice
La firma estadounidense fue subcontratada por Catler-Uniservice, justamente para fabricar el "corazón" de la planta separadora. Inclusive logró que YPFB abriera una carta de crédito irrevocable por 35 millones de dólares. De ese total se desembolsaron 13,3 millones.
Vincenti reconoció que con los fondos entregados, la empresa "ha construido partes de la planta por un valor, a decir de los informes que hemos recibido, aún mayor a los 13,6 millones de dólares entregados". Sin embargo, "el problema radica en que no podemos hacer" un desembolso adicional de un monto similar, agregó.
YPFB no puede incrementar los pagos a Gulsby porque se contravendría las normas en vigencia, remarcó el Ministro al recordar que cuando ejercía como Director de la petrolera estatal, les informaron que la compañía estadounidense fabricó el equipo contratado.
"Los informes que nosotros recibimos inicialmente indicaban que había las su ficientes condiciones técnicas", pero "el problema fundamental despué s radicó en la imposibilidad de orden normativo, de orden legal", puesto que "no podíamos pagar la exigencia que nos planteaba Gulsby".
La petrolera estatal no puede pagar "un monto equivalente a otros 13 millones de dólares porque no hay una relación, no había ni hay una relación contractual directa ente YPFB y Gulsby", remarcó el Ministro de Hidrocarburos al puntualizar que "éste ha sido el punto principal".
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