La Paz | La Prensa.-La estatal Boliviana de Aviación (BoA) empieza a tomar liderazgo en algunas rutas nacionales, en desmedro de AeroSur, empresa nacional que, sin embargo, en términos globales continúa en el primer sitial de la aeronavegación comercial, aunque ya tuvo números rojos en 2009.
Según datos de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Transporte y Telecomunicaciones (ATT), BoA logró mayor cantidad de pasajeros en tres rutas: Cochabamba-Cobija, con el 64 por ciento; Cochabamba-Sucre, con el 73 por ciento, y Cochabamba-Tarija, con el 93 por ciento.
Pero las rutas principales continúan siendo controladas por Aerosur. Los datos de ATT indican que en el tramo Cochabamba-La Paz-Cochabamba, esta empresa dobla en pasajeros a BoA, por ejemplo, en diciembre de 2009, la primera tuvo 15.548 pasajeros y la segunda, 6.708.
En la ruta La Paz-Santa Cruz-La Paz, AerSour llevó en diciembre a 23.482 personas, mientras que BoA transportó sólo a 9.679.
En los vuelos Cochabamba-Santa Cruz-Cochabamba, la primera tiene 21.427 pasajeros, también en diciembre, y BoA, 16.750.
Las cifras globales de 2009 muestran que AeroSur encabeza el mercado nacional. En todo el año, esta compañía transportó 964.370 pasajeros, mientras que BoA, 261.759 personas.
El director técnico de la ATT, Fernando Llanos, destaca el que BoA tome liderazgo en algunas rutas, pero señala que lo importante es que con la presencia de la estatal se ha generado una competencia que mejora el servicio para el usuario.
AeroSur, sin embargo, está preocupada por esta situación porque considera que existe una competencia desleal que afecta su mercado, a tal extremo que, según el presidente de AeroSur, Humberto Roca, el año pasado tuvieron una pérdida de ocho millones de dólares.
Al poner ejemplos de la competencia desleal, los aviones de BoA y TAM tienen preferencia en las salidas del aeropuerto sin control ni fiscalización.
“Lo que hacemos es ajustar todos nuestros costos. Vamos a iniciar todas las acciones necesarias para garantizar ecuanimidad en el trato, nosotros no tenemos incentivos ni subvenciones, queremos reglas claras”, dijo Roca y denunció que existe un interés del Gobierno para que la empresa quiebre por razones políticas. Puso como ejemplo que les quitaron cuatro vuelos a Buenos Aires sin explicar razones.
El gerente de BoA, Ronald Casso, explicó que el ascenso de la estatal se debe a una política agresiva de presiones. “Nos enfrentamos a una posición monopólica (AeroSur) que controlaba los canales de distribución y para romper ese canal tenemos ofertas tarifarias agresivas”.
Según datos de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Transporte y Telecomunicaciones (ATT), BoA logró mayor cantidad de pasajeros en tres rutas: Cochabamba-Cobija, con el 64 por ciento; Cochabamba-Sucre, con el 73 por ciento, y Cochabamba-Tarija, con el 93 por ciento.
Pero las rutas principales continúan siendo controladas por Aerosur. Los datos de ATT indican que en el tramo Cochabamba-La Paz-Cochabamba, esta empresa dobla en pasajeros a BoA, por ejemplo, en diciembre de 2009, la primera tuvo 15.548 pasajeros y la segunda, 6.708.
En la ruta La Paz-Santa Cruz-La Paz, AerSour llevó en diciembre a 23.482 personas, mientras que BoA transportó sólo a 9.679.
En los vuelos Cochabamba-Santa Cruz-Cochabamba, la primera tiene 21.427 pasajeros, también en diciembre, y BoA, 16.750.
Las cifras globales de 2009 muestran que AeroSur encabeza el mercado nacional. En todo el año, esta compañía transportó 964.370 pasajeros, mientras que BoA, 261.759 personas.
El director técnico de la ATT, Fernando Llanos, destaca el que BoA tome liderazgo en algunas rutas, pero señala que lo importante es que con la presencia de la estatal se ha generado una competencia que mejora el servicio para el usuario.
AeroSur, sin embargo, está preocupada por esta situación porque considera que existe una competencia desleal que afecta su mercado, a tal extremo que, según el presidente de AeroSur, Humberto Roca, el año pasado tuvieron una pérdida de ocho millones de dólares.
Al poner ejemplos de la competencia desleal, los aviones de BoA y TAM tienen preferencia en las salidas del aeropuerto sin control ni fiscalización.
“Lo que hacemos es ajustar todos nuestros costos. Vamos a iniciar todas las acciones necesarias para garantizar ecuanimidad en el trato, nosotros no tenemos incentivos ni subvenciones, queremos reglas claras”, dijo Roca y denunció que existe un interés del Gobierno para que la empresa quiebre por razones políticas. Puso como ejemplo que les quitaron cuatro vuelos a Buenos Aires sin explicar razones.
El gerente de BoA, Ronald Casso, explicó que el ascenso de la estatal se debe a una política agresiva de presiones. “Nos enfrentamos a una posición monopólica (AeroSur) que controlaba los canales de distribución y para romper ese canal tenemos ofertas tarifarias agresivas”.
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