Un bloqueo cerrado, de aproximadamente cuatro horas, en las avenidas Blanco Galindo y Capitán Víctor Ustariz, a la altura del kilómetro 10 y medio hacia Quillacollo, fue violentamente despejado ayer al cerrar la tarde por aproximadamente 120 efectivos policiales, que utilizaron gases lacrimógenos contra los bloqueadores, en su mayoría mujeres productoras, que reclaman mejores precios para el litro de leche cruda entregada a PIL Andina.
La violenta acción policial, que no consideró la presencia de mujeres y muchos menores de edad, comenzó al promediar las 18:00 y se prolongó hasta las 19:30, una vez que el gerente general de PIL Andina rechazó toda posibilidad de incrementar sobre los 3,08 bolivianos el litro de materia prima y los productores determinaron mantener con indefinidamente el bloqueo de las dos avenidas que unen Cochabamba con Quillacollo.
Antes de registrarse los primeros disparos de gas, el comandante policial, Hernán Trujillo, dialogó con los dirigentes de l sector, a quienes exhortó infructuosamente a levantar el bloqueo.
A partir de ese momento, decenas de cápsulas de gas inundaron la avenida Galindo, violentos enfrentamientos se registraron entre policías y lecheros, las mujeres y niños huyeron a lugares abiertos y los varones atacaron con piedras tanto las instalaciones de PIL Andina como los vidrios de varias flotas, colectivos, trufis y camiones parados por el bloqueo de la carretera.
Los iniciales 60 efectivos policiales tuvieron que recibir refuerzos de otros 60 para restablecer el tráfico vehicular en las dos avenidas y sentar una vigilia policial durante la noche.
Una mayoría de los dirigentes de las siete asociaciones de productores lecheros, tras declararse en la clandestinidad, condenaron la violenta agresión que sufrieron, ya que su, “único delito fue bloquear de manera pacífica reclamando un precio justo para la leche”.
Su principal dirigente, Germán Terán, demandó la libertad inmediata d e todos los detenidos y anunció para hoy por la mañana una asamblea g eneral en la sede de la Feprolec con el propósito de evaluar el conflicto y determinar las medias que más convengan a los intereses del sector.
Terán recordó que después de tres horas de bloquear la avenida, el gerente general de la principal industria láctea del país ratificó el incremento temporal y no definitivo de 0,40 bolivianos por litro de leche cruda vigente desde el 10 de febrero hasta el 11 de marzo.
Tras un cuarto intermedio de 10 minutos, el gerente general de PIL Andina ratificó la imposibilidad de un mayor incremento y convocó a los dirigentes de las siete asociaciones lecheras a reunirse el próximo viernes a las 11:00 para mejorar, en algunos centavos más, la oferta inicial. La propuesta fue rechazada por los manifestantes.
La violenta acción policial, que no consideró la presencia de mujeres y muchos menores de edad, comenzó al promediar las 18:00 y se prolongó hasta las 19:30, una vez que el gerente general de PIL Andina rechazó toda posibilidad de incrementar sobre los 3,08 bolivianos el litro de materia prima y los productores determinaron mantener con indefinidamente el bloqueo de las dos avenidas que unen Cochabamba con Quillacollo.
Antes de registrarse los primeros disparos de gas, el comandante policial, Hernán Trujillo, dialogó con los dirigentes de l sector, a quienes exhortó infructuosamente a levantar el bloqueo.
A partir de ese momento, decenas de cápsulas de gas inundaron la avenida Galindo, violentos enfrentamientos se registraron entre policías y lecheros, las mujeres y niños huyeron a lugares abiertos y los varones atacaron con piedras tanto las instalaciones de PIL Andina como los vidrios de varias flotas, colectivos, trufis y camiones parados por el bloqueo de la carretera.
Los iniciales 60 efectivos policiales tuvieron que recibir refuerzos de otros 60 para restablecer el tráfico vehicular en las dos avenidas y sentar una vigilia policial durante la noche.
Una mayoría de los dirigentes de las siete asociaciones de productores lecheros, tras declararse en la clandestinidad, condenaron la violenta agresión que sufrieron, ya que su, “único delito fue bloquear de manera pacífica reclamando un precio justo para la leche”.
Su principal dirigente, Germán Terán, demandó la libertad inmediata d e todos los detenidos y anunció para hoy por la mañana una asamblea g eneral en la sede de la Feprolec con el propósito de evaluar el conflicto y determinar las medias que más convengan a los intereses del sector.
Terán recordó que después de tres horas de bloquear la avenida, el gerente general de la principal industria láctea del país ratificó el incremento temporal y no definitivo de 0,40 bolivianos por litro de leche cruda vigente desde el 10 de febrero hasta el 11 de marzo.
Tras un cuarto intermedio de 10 minutos, el gerente general de PIL Andina ratificó la imposibilidad de un mayor incremento y convocó a los dirigentes de las siete asociaciones lecheras a reunirse el próximo viernes a las 11:00 para mejorar, en algunos centavos más, la oferta inicial. La propuesta fue rechazada por los manifestantes.
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