De “precipitada, mal intencionada y amedrentadora” calificó la Cámara Departamental de Industria de Cochabamba (CDI) la fiscalización de los estados financieros e inversiones de la transnacional Coca-Cola –representada en el país por la empresa Embotelladora Boliviana (Embol)– iniciada ayer por la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Empresas (AEMP).
Ayer por la mañana, el ejecutivo de la entidad reguladora Óscar Cámara junto a técnicos en materia financiara y legal se hicieron presentes en las oficinas administrativas de Coca-Cola en la ciudad de La Paz para iniciar la verificación, fiscalización y auditorías correspondientes, con el propósito de identificar el destino de más de 1 millón de quintales de azúcar adquiridos el año pasado al ingenio azucarero Unagro a precio preferencial.
En criterio del presidente de la CDI de Cochabamba, no es adecuado anticipar criterios económico-financieros respecto de una empresa porque menoscaba su prestigio y recomendó al Estado mayor prudencia cuando se refiere a posibles hechos irregulares que pueda estar cometiendo una empresa.
“Lo que el Gobierno está haciendo es amedrentar a esta empresa, a todo el sector industrial y empresarial de Bolivia cuando no hay una normativa que regule los precios de los artículos, más todavía cuando son de lujo como Coca-Cola, que está gravada por el Impuesto al Consumo Específico”, sostuvo y agregó que el precio de los 1,3 millones de quintales que pagó a Unagro es al por mayor y en ningún caso tiene subvención estatal.
“Estamos muy preocupados por la acción del Gobierno, que tiene absoluta potestad para realizar todas las fiscalizaciones que vea por conveniente; pero no con el modo de realizarlo; porque no creemos que sea adecuado anticipar criterios”, sostuvo.
El ejecutivo de la entidad reguladora informó que, previo levantamiento de un acta, a partir de la fecha la AEMP empieza a analizar y revisar, toda la documentación requerida y presentada en un lapso de 10 días para luego emitir un dictamen dentro de 40 días.
Los ejecutivos de Embol ayer informaron que los precios de sus productos en todo territorio nacional mantendrán el incremento de entre 0,50 y un boliviano .
Ayer por la mañana, el ejecutivo de la entidad reguladora Óscar Cámara junto a técnicos en materia financiara y legal se hicieron presentes en las oficinas administrativas de Coca-Cola en la ciudad de La Paz para iniciar la verificación, fiscalización y auditorías correspondientes, con el propósito de identificar el destino de más de 1 millón de quintales de azúcar adquiridos el año pasado al ingenio azucarero Unagro a precio preferencial.
En criterio del presidente de la CDI de Cochabamba, no es adecuado anticipar criterios económico-financieros respecto de una empresa porque menoscaba su prestigio y recomendó al Estado mayor prudencia cuando se refiere a posibles hechos irregulares que pueda estar cometiendo una empresa.
“Lo que el Gobierno está haciendo es amedrentar a esta empresa, a todo el sector industrial y empresarial de Bolivia cuando no hay una normativa que regule los precios de los artículos, más todavía cuando son de lujo como Coca-Cola, que está gravada por el Impuesto al Consumo Específico”, sostuvo y agregó que el precio de los 1,3 millones de quintales que pagó a Unagro es al por mayor y en ningún caso tiene subvención estatal.
“Estamos muy preocupados por la acción del Gobierno, que tiene absoluta potestad para realizar todas las fiscalizaciones que vea por conveniente; pero no con el modo de realizarlo; porque no creemos que sea adecuado anticipar criterios”, sostuvo.
El ejecutivo de la entidad reguladora informó que, previo levantamiento de un acta, a partir de la fecha la AEMP empieza a analizar y revisar, toda la documentación requerida y presentada en un lapso de 10 días para luego emitir un dictamen dentro de 40 días.
Los ejecutivos de Embol ayer informaron que los precios de sus productos en todo territorio nacional mantendrán el incremento de entre 0,50 y un boliviano .
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