La amenaza hecha por los mineros cooperativistas de tomar por la fuerza las áreas de Armas y Doble Ancho fue denunciada ayer por el ejecutivo del Sindicato de Trabajadores Mineros de Colquiri, Severino Estallani.
El conflicto en la zona, generado en torno a la explotación de la veta Rosario, en la mina Colquiri, no cesó por completo en los últimos tres meses, a pesar de que existe un acuerdo sellado a través de un decreto supremo que fija los lugares que debe explotar cada sector, dijo el jueves el ejecutivo de la Federación de Trabajadores Mineros de Bolivia, Miguel Pérez.
Ningún dirigente cooperativista pudo ser contactado ayer por este medio; sin embargo, el jueves pasado, el miembro del Comité de Vigilancia de la Cooperativa 26 de Febrero, Basilio Montaño, desmintió las afirmaciones de Pérez y señaló que no existía ninguna tensión en la mina.
Ayer, Estallani afirmó que su sector tiene información que señala que los cooperativistas no sólo tienen dinamita, sino ta mbién armas, por lo que su sector pidió a la Gobernación paceña que envíe refuerzos policiales al lugar.
El dirigente dijo que el conflicto se reavivó porque los cooperativistas se niegan a firmar el contrato de arrendamiento de las áreas de explotación.
Estallani lamentó que, tras una reunión sostenida el miércoles, el Gobierno se haya limitado a decir que buscaría reunirse con los cooperativistas.
El conflicto en la zona, generado en torno a la explotación de la veta Rosario, en la mina Colquiri, no cesó por completo en los últimos tres meses, a pesar de que existe un acuerdo sellado a través de un decreto supremo que fija los lugares que debe explotar cada sector, dijo el jueves el ejecutivo de la Federación de Trabajadores Mineros de Bolivia, Miguel Pérez.
Ningún dirigente cooperativista pudo ser contactado ayer por este medio; sin embargo, el jueves pasado, el miembro del Comité de Vigilancia de la Cooperativa 26 de Febrero, Basilio Montaño, desmintió las afirmaciones de Pérez y señaló que no existía ninguna tensión en la mina.
Ayer, Estallani afirmó que su sector tiene información que señala que los cooperativistas no sólo tienen dinamita, sino ta mbién armas, por lo que su sector pidió a la Gobernación paceña que envíe refuerzos policiales al lugar.
El dirigente dijo que el conflicto se reavivó porque los cooperativistas se niegan a firmar el contrato de arrendamiento de las áreas de explotación.
Estallani lamentó que, tras una reunión sostenida el miércoles, el Gobierno se haya limitado a decir que buscaría reunirse con los cooperativistas.
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