El estancamiento de la inversión privada en Bolivia frenará la expansión de la economía boliviana cuyo crecimiento dependerá del comportamiento de los precios internacionales de las materias primas, dijo ayer la Fundación Milenio.
La organización, que ayer presentó en la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), su informe sobre la economía en el primer semestre de 2010, indicó que también es previsible que la oferta decaiga ante el menor esfuerzo para generar una mayor capacidad productiva y las importaciones crezcan mucho más.
“Si no hay proyectos productivos importantes, si no hay una inversión del sector privado, entonces uno realmente no puede esperar tasas muy grandes de crecimiento”, explicó José Luis Evia, investigador principal de Fundación Milenio.
Señaló que el país es cada vez más dependiente de lo que pasa en los mercados internacionales, lo que es riesgoso.
“Si las materias primas siguen con este buen ritm o de recuperación de los precios entonces vamos a tener suficiente recursos para realizar todas las importaciones que necesita el país, pero ciertamente si el precio de las materias primas colapsa o sufre un retroceso podríamos estar en una situación incómoda”, agregó.
De acuerdo con los datos de la Fundación, la economía boliviana creció en el primer semestre de 2010 un 3,3 por ciento, mucho menor en comparación a los porcentajes registrados en otros países como Brasil, Chile, Paraguay y otros.
Esto se atribuye a la falta de dinamismo en la inversión, principalmente de la extranjera, que alcanzó solamente 156 millones de dólares en el primer trimestre de este año frente a 245 millones de dólares en el mismo período del año pasado, y de la inversión privada nacional.Ingresos
Evia indicó también que aunque hubo un incremento de los ingresos de las personas no es homogéneo y sostenible porque también depende del comportamiento de los precios internacion ales de los bienes.
“Hubo un incremento en los ingresos medi os del país, muy importante ciertamente, pero estos incrementos no son homogéneos, no es que todas las personas reciben o perciben ese mismo incremento si no que es para ciertos sectores y ciertos grupos”, indicó.
Los datos de la Fundación señalan que la demanda total de bienes y servicios en el primer semestre subió 3,3 por ciento.
La organización, que ayer presentó en la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), su informe sobre la economía en el primer semestre de 2010, indicó que también es previsible que la oferta decaiga ante el menor esfuerzo para generar una mayor capacidad productiva y las importaciones crezcan mucho más.
“Si no hay proyectos productivos importantes, si no hay una inversión del sector privado, entonces uno realmente no puede esperar tasas muy grandes de crecimiento”, explicó José Luis Evia, investigador principal de Fundación Milenio.
Señaló que el país es cada vez más dependiente de lo que pasa en los mercados internacionales, lo que es riesgoso.
“Si las materias primas siguen con este buen ritm o de recuperación de los precios entonces vamos a tener suficiente recursos para realizar todas las importaciones que necesita el país, pero ciertamente si el precio de las materias primas colapsa o sufre un retroceso podríamos estar en una situación incómoda”, agregó.
De acuerdo con los datos de la Fundación, la economía boliviana creció en el primer semestre de 2010 un 3,3 por ciento, mucho menor en comparación a los porcentajes registrados en otros países como Brasil, Chile, Paraguay y otros.
Esto se atribuye a la falta de dinamismo en la inversión, principalmente de la extranjera, que alcanzó solamente 156 millones de dólares en el primer trimestre de este año frente a 245 millones de dólares en el mismo período del año pasado, y de la inversión privada nacional.Ingresos
Evia indicó también que aunque hubo un incremento de los ingresos de las personas no es homogéneo y sostenible porque también depende del comportamiento de los precios internacion ales de los bienes.
“Hubo un incremento en los ingresos medi os del país, muy importante ciertamente, pero estos incrementos no son homogéneos, no es que todas las personas reciben o perciben ese mismo incremento si no que es para ciertos sectores y ciertos grupos”, indicó.
Los datos de la Fundación señalan que la demanda total de bienes y servicios en el primer semestre subió 3,3 por ciento.
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