Las remesas que los migrantes bolivianos enviaron este año entre enero y julio bajaron un 10 por ciento respecto al mismo período del año pasado, informó ayer el Banco Central de Bolivia (BCB).
La entidad indicó que en los primero siete meses de este año, ingresaron al país remesas familiares por 521 millones de dólares, mientras que en 2009 la cifra fue de 576,8 millones.
“Esta reducción es moderada en el contexto de la crisis económica mundial y de la crisis de la deuda soberana en la Unión Europea que se ha reflejado en altos niveles de desempleo, sobre todo en sectores como la construcción y servicios en Estados Unidos y España”, explicó el BCB en un comunicado.
Añade que a esto hay que sumar también el efecto de la cotización del euro, cuya depreciación en 10,5 por ciento entre julio de 2010 y diciembre de 2009 implica una disminución del monto de remesas provenientes de Europa medidas en dólares. Julio
El ente emisor informó también que e l nivel de las remesas de julio de 2010 llegó a 74,5 millones de dólares, mayor en 3,1 por ciento respecto a junio del mismo año.
Sin embargo, en comparación con julio de 2009, cuando se registró un ingreso por remesas de 93 millones de dólares, existe un descenso de casi 20 por ciento, porcentaje que es mucho mayor (-22 por ciento) respecto a julio de 2008.
Pese a las cifras, el BCB intentó minimizar la caída e indicó que “el monto alcanzado en los siete primeros meses de 2010, de 521 millones de dólares, es sustancialmente mayor al percibido hace algunos años (en igual periodo de los años de 2001-2005 con un promedio de 85 millones de dólares)”.
Agregó que, por tanto, “las remesas continúan en un nivel elevado, aportando importantes ingresos adicionales a la economía nacional y las familias que perciben estos recursos”.
Las remesas tienen un gran impacto en la economía de América Latina. Representan el 1,6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de la región y en el caso de Bolivia su equivalencia es aún mayor: el 6,6 por ciento.
La entidad indicó que en los primero siete meses de este año, ingresaron al país remesas familiares por 521 millones de dólares, mientras que en 2009 la cifra fue de 576,8 millones.
“Esta reducción es moderada en el contexto de la crisis económica mundial y de la crisis de la deuda soberana en la Unión Europea que se ha reflejado en altos niveles de desempleo, sobre todo en sectores como la construcción y servicios en Estados Unidos y España”, explicó el BCB en un comunicado.
Añade que a esto hay que sumar también el efecto de la cotización del euro, cuya depreciación en 10,5 por ciento entre julio de 2010 y diciembre de 2009 implica una disminución del monto de remesas provenientes de Europa medidas en dólares. Julio
El ente emisor informó también que e l nivel de las remesas de julio de 2010 llegó a 74,5 millones de dólares, mayor en 3,1 por ciento respecto a junio del mismo año.
Sin embargo, en comparación con julio de 2009, cuando se registró un ingreso por remesas de 93 millones de dólares, existe un descenso de casi 20 por ciento, porcentaje que es mucho mayor (-22 por ciento) respecto a julio de 2008.
Pese a las cifras, el BCB intentó minimizar la caída e indicó que “el monto alcanzado en los siete primeros meses de 2010, de 521 millones de dólares, es sustancialmente mayor al percibido hace algunos años (en igual periodo de los años de 2001-2005 con un promedio de 85 millones de dólares)”.
Agregó que, por tanto, “las remesas continúan en un nivel elevado, aportando importantes ingresos adicionales a la economía nacional y las familias que perciben estos recursos”.
Las remesas tienen un gran impacto en la economía de América Latina. Representan el 1,6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de la región y en el caso de Bolivia su equivalencia es aún mayor: el 6,6 por ciento.
0 comentarios:
Publicar un comentario