En menos de ocho días, los precios de algunos productos básicos de la canasta familiar, como la carne de pollo y de res, además de la papa, se dispararon en los mercados. Asimismo, su abastecimiento es irregular.
Las causas tienen que ver con la caída de la producción avícola en el departamento y efectos de la sequía.
Los Tiempos constató ayer en los mercados La Cancha, Calatayud y San Antonio que el costo de la carne de pollo se incrementó entre dos y tres bolivianos: el kilo de carne de pollo con menudencia, de 13,50 a 15 bolivianos; pollo sin menudencia, de 14 a 15,50; pechuga, de 19 a 22; piernas, de 17 a 19; alitas, de 14 a 16 y filete, de 23 a 26 bolivianos.
En los centros de abasto, muchos compradores protestaron por la elevación de precios y demandaron control de parte de las autoridades, mientras que las vendedoras al detalle se defendieron y dijeron que los productos empezaron a escasear y la demanda ha crecido.
Los precios de la carne de res procedente de Santa Cruz también experimentaron una subida: el kilo de surtido aumentó de 20 a 22 bolivianos; el filete, de 27 a 30; la cadera y la chuleta, de 20 a 23 bolivianos y la carne molida, de 18 a 22 bolivianos, debido a que los comercializadores del producto están transportando menos ganado parado porque la sequía mató a miles de animales.
Las comercializadoras dijeron que es posible que el valor de este producto siga subiendo porque “está llegando cada vez menos ganado”.
Respecto a la venta de papa, otro producto indispensable en la cocina diaria, las intermediarias de la final 16 de julio y los mercados Triángulo, República y Calatayud informaron que la arroba de papa nueva “imilla” de primera, procedente de Morochata, subió de 38 a 45 bolivianos y la “holandesa” de Capinota, de 42 a 50 bolivianos la arroba.
En los mercados Calatayud y la Pampa, además de en las calles Brasil, Lanza, Honduras, Punata y final 16 de Julio, donde se manalmente llegan los camiones cargados de harina importada de Argent ina, los precios se dispararon: el quintal de 50 kilogramos de las marcas Leticia, Adelia María y Chacabuco, entre otras, subió de 190 a 208 bolivianos, la arroba a 56 bolivianos y la cuartilla a 14 bolivianos.
Cabe recordar que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó en agosto un 1,06 por ciento, la cifra más alta del año, con lo que la inflación acumulada en 2010 se situó en 2,12 por ciento y la acumulada a 12 meses en 2,60 por ciento, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El incremento de precios no es sólo en Cochabamba. En los mercados La Ramada y Abasto de Santa Cruz, los alimentos que más subieron de precio son el pollo, la papa y la cebolla, informó El Deber. El alza causa enojo en la población y hasta en ciertos casos discusión entre los vendedores y los compradores.
En la ciudad de La Paz se evidencia similar comportamiento. El precio del kilo de pollo IMBA es de 15 bolivianos y la tendencia es que siga subiendo. La semana pasada estaba en 14 bolivianos, según reportes de algunas amas de casa. Estables
Debido a un equilibrio entre la oferta y demanda, los precios de otros productos de la canasta familiar como azúcar, arroz y aceite, entre otros, se mantienen.
En una mayoría de los puestos de venta mayorista de la final 16 de Julio y las calles Lanza, Brasil, Capinota y algunos puestos del mercado Calatayud, los precios del azúcar de primera calidad (Bélgica y San Aurelio) se mantiene entre 190 y 200 bolivianos.
Lo mismo sucede con el arroz de primera “grano de oro”, procedente de Okinawa: el quintal de 46 kilogramos es comercializado a 280 bolivianos, la arroba a 85 y la cuartilla a 22 bolivianos. El quintal de “grano de oro” de segunda está a 250 bolivianos, la arroba 80 y la cuartilla 20.
Las causas tienen que ver con la caída de la producción avícola en el departamento y efectos de la sequía.
Los Tiempos constató ayer en los mercados La Cancha, Calatayud y San Antonio que el costo de la carne de pollo se incrementó entre dos y tres bolivianos: el kilo de carne de pollo con menudencia, de 13,50 a 15 bolivianos; pollo sin menudencia, de 14 a 15,50; pechuga, de 19 a 22; piernas, de 17 a 19; alitas, de 14 a 16 y filete, de 23 a 26 bolivianos.
En los centros de abasto, muchos compradores protestaron por la elevación de precios y demandaron control de parte de las autoridades, mientras que las vendedoras al detalle se defendieron y dijeron que los productos empezaron a escasear y la demanda ha crecido.
Los precios de la carne de res procedente de Santa Cruz también experimentaron una subida: el kilo de surtido aumentó de 20 a 22 bolivianos; el filete, de 27 a 30; la cadera y la chuleta, de 20 a 23 bolivianos y la carne molida, de 18 a 22 bolivianos, debido a que los comercializadores del producto están transportando menos ganado parado porque la sequía mató a miles de animales.
Las comercializadoras dijeron que es posible que el valor de este producto siga subiendo porque “está llegando cada vez menos ganado”.
Respecto a la venta de papa, otro producto indispensable en la cocina diaria, las intermediarias de la final 16 de julio y los mercados Triángulo, República y Calatayud informaron que la arroba de papa nueva “imilla” de primera, procedente de Morochata, subió de 38 a 45 bolivianos y la “holandesa” de Capinota, de 42 a 50 bolivianos la arroba.
En los mercados Calatayud y la Pampa, además de en las calles Brasil, Lanza, Honduras, Punata y final 16 de Julio, donde se manalmente llegan los camiones cargados de harina importada de Argent ina, los precios se dispararon: el quintal de 50 kilogramos de las marcas Leticia, Adelia María y Chacabuco, entre otras, subió de 190 a 208 bolivianos, la arroba a 56 bolivianos y la cuartilla a 14 bolivianos.
Cabe recordar que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó en agosto un 1,06 por ciento, la cifra más alta del año, con lo que la inflación acumulada en 2010 se situó en 2,12 por ciento y la acumulada a 12 meses en 2,60 por ciento, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El incremento de precios no es sólo en Cochabamba. En los mercados La Ramada y Abasto de Santa Cruz, los alimentos que más subieron de precio son el pollo, la papa y la cebolla, informó El Deber. El alza causa enojo en la población y hasta en ciertos casos discusión entre los vendedores y los compradores.
En la ciudad de La Paz se evidencia similar comportamiento. El precio del kilo de pollo IMBA es de 15 bolivianos y la tendencia es que siga subiendo. La semana pasada estaba en 14 bolivianos, según reportes de algunas amas de casa. Estables
Debido a un equilibrio entre la oferta y demanda, los precios de otros productos de la canasta familiar como azúcar, arroz y aceite, entre otros, se mantienen.
En una mayoría de los puestos de venta mayorista de la final 16 de Julio y las calles Lanza, Brasil, Capinota y algunos puestos del mercado Calatayud, los precios del azúcar de primera calidad (Bélgica y San Aurelio) se mantiene entre 190 y 200 bolivianos.
Lo mismo sucede con el arroz de primera “grano de oro”, procedente de Okinawa: el quintal de 46 kilogramos es comercializado a 280 bolivianos, la arroba a 85 y la cuartilla a 22 bolivianos. El quintal de “grano de oro” de segunda está a 250 bolivianos, la arroba 80 y la cuartilla 20.
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