Unas 25 mil familias que desarrollan actividades productivas y de servicios en los municipios de Yucumo, San Borja, San Ignacio de Moxos y Trinidad, la capital beniana, reciben energía eléctrica limpia continua y sin interferencias a través de la línea de transmisión eléctrica Caranavi-Trinidad, inaugurada oficialmente ayer.
Después de cinco años de espera y postergación, el Proyecto Línea de Transmisión Eléctrica Caranavi-Trinidad finalmente se hizo realidad, dijo el gerente general de la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), Rafael Alarcón.
La línea de transmisión eléctrica Caranavi-Trinidad tiene una longitud de 370 kilómetros y capacidad de transportar 35 megavatios (MW) de potencia.
En la línea fue instalada fibra óptica con el propósito de implementación de servicios multimedia en la región (Internet de banda ancha, voz y video en las localidades de influencia de la línea), explicó el funcionario.
El suministro de energía eléctrica a las poblaciones del á rea de influencia demandó la construcción de cuatro subestaciones de rebaje en Yucumo de tres MW, en San Borja de tres MW, en San Ignacio de Moxos de tres MW y en la capital beniana de 25 MW.
La ejecución del proyecto demandó una inversión global de 38,25 millones de dólares, de los cuales 28,5 millones corresponden a la construcción de la línea de transmisión y cuatro subestaciones eléctricas; 2,6 millones al sub programa de 34,5 kilovatios y 7,15 millones a tareas de supervisión, fiscalización, instalación de campamentos y otros. Beneficios
A partir del 16 de marzo de este año, aproximadamente 1.500 familias de los municipios de Yucumo y El Palmar cuentan con el servicio de energía eléctrica del Sistema Interconectado Nacional (SIN), desde el 29 de mayo 3.500 familias del municipio de San Borja y a partir del 15 de agosto unas 15 familias de Trinidad.
Entre los beneficios que reporta la línea de transmisión Caranavi-Trinidad están que YPFB dejará de subven cionar diesel para la generación de energía eléctrica en los sistemas eléctricos de Beni, se reducirá drásticamente la contaminación ambiental y mejorarán las condiciones de suministro de energía eléctrica de unas 25 mil familias asentadas en los cuatro municipios y poblaciones rurales, dijo Alarcón.
Adicionalmente, señaló, desaparecerán los cortes y racionamientos de energía; las micro, pequeñas y grandes empresas utilizarán energía eléctrica en sus procesos productivos y generarán nuevos empleos directos; los ingresos familiares y la calidad de vida mejorarán notablemente porque podrán desarrollar emprendimientos productivos y actividades educativas por las noches.
Agregó que la fibra óptica instalada en la línea de transmisión mejorará los servicios de telecomunicaciones en las poblaciones de Yucumo, San Borja, San Ignacio de Moxos y Trinidad, permitiendo el acceso a Internet de banda ancha, educación virtual, video conferencias y otros servicios en telecomunicaciones.
Costos
bajan para consumidores y el Estado
Hasta hace poco, los beneficiarios del proyecto línea de transmisión Caranavi-Trinidad en los cuatro municipios pagaban 1,04 bolivianos por consumo de un kilovatio /hora (KWH) de electricidad. A partir de septiembre de este año, los pobladores pagarán 10 por ciento menos por consumo de la misma cantidad.
Las plantas termoeléctricas de Yucumo, San Borja, San Ignacio de Moxos y Trinidad utilizaban mensualmente un promedio de dos millones de litros de diesel, entre nacional e importado, en la generación de energía eléctrica. Actualmente, YPFB dejará de entregar y ahorrará 24 millones de litros de ese combustible, equivalente a 55 millones de bolivianos al año, explicó ENDE.
“Atrás quedó la generación termoeléctrica utilizando grandes volúmenes de diesel como combustible, así como los racionamientos y cortes permanentes de energía, que se registraban en determinadas épocas del año, particularmente en la temporada de lluvias, interrumpiendo las actividades productivas e incluso de servicios de la región”, dijo el gerente general de ENDE, Ra fael Alarcón.
En Trinidad y en San Ignacio de Moxos, la energía suministrada por la línea de transmisión es distribuida por las respectivas empresas locales, mientras que en Yucumo y San Borja la tarea estará a cargo de ENDE. En todos los casos, las tarifas son económicas y fueron determinadas por la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Electricidad (AE).
Después de cinco años de espera y postergación, el Proyecto Línea de Transmisión Eléctrica Caranavi-Trinidad finalmente se hizo realidad, dijo el gerente general de la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), Rafael Alarcón.
La línea de transmisión eléctrica Caranavi-Trinidad tiene una longitud de 370 kilómetros y capacidad de transportar 35 megavatios (MW) de potencia.
En la línea fue instalada fibra óptica con el propósito de implementación de servicios multimedia en la región (Internet de banda ancha, voz y video en las localidades de influencia de la línea), explicó el funcionario.
El suministro de energía eléctrica a las poblaciones del á rea de influencia demandó la construcción de cuatro subestaciones de rebaje en Yucumo de tres MW, en San Borja de tres MW, en San Ignacio de Moxos de tres MW y en la capital beniana de 25 MW.
La ejecución del proyecto demandó una inversión global de 38,25 millones de dólares, de los cuales 28,5 millones corresponden a la construcción de la línea de transmisión y cuatro subestaciones eléctricas; 2,6 millones al sub programa de 34,5 kilovatios y 7,15 millones a tareas de supervisión, fiscalización, instalación de campamentos y otros. Beneficios
A partir del 16 de marzo de este año, aproximadamente 1.500 familias de los municipios de Yucumo y El Palmar cuentan con el servicio de energía eléctrica del Sistema Interconectado Nacional (SIN), desde el 29 de mayo 3.500 familias del municipio de San Borja y a partir del 15 de agosto unas 15 familias de Trinidad.
Entre los beneficios que reporta la línea de transmisión Caranavi-Trinidad están que YPFB dejará de subven cionar diesel para la generación de energía eléctrica en los sistemas eléctricos de Beni, se reducirá drásticamente la contaminación ambiental y mejorarán las condiciones de suministro de energía eléctrica de unas 25 mil familias asentadas en los cuatro municipios y poblaciones rurales, dijo Alarcón.
Adicionalmente, señaló, desaparecerán los cortes y racionamientos de energía; las micro, pequeñas y grandes empresas utilizarán energía eléctrica en sus procesos productivos y generarán nuevos empleos directos; los ingresos familiares y la calidad de vida mejorarán notablemente porque podrán desarrollar emprendimientos productivos y actividades educativas por las noches.
Agregó que la fibra óptica instalada en la línea de transmisión mejorará los servicios de telecomunicaciones en las poblaciones de Yucumo, San Borja, San Ignacio de Moxos y Trinidad, permitiendo el acceso a Internet de banda ancha, educación virtual, video conferencias y otros servicios en telecomunicaciones.
Costos
bajan para consumidores y el Estado
Hasta hace poco, los beneficiarios del proyecto línea de transmisión Caranavi-Trinidad en los cuatro municipios pagaban 1,04 bolivianos por consumo de un kilovatio /hora (KWH) de electricidad. A partir de septiembre de este año, los pobladores pagarán 10 por ciento menos por consumo de la misma cantidad.
Las plantas termoeléctricas de Yucumo, San Borja, San Ignacio de Moxos y Trinidad utilizaban mensualmente un promedio de dos millones de litros de diesel, entre nacional e importado, en la generación de energía eléctrica. Actualmente, YPFB dejará de entregar y ahorrará 24 millones de litros de ese combustible, equivalente a 55 millones de bolivianos al año, explicó ENDE.
“Atrás quedó la generación termoeléctrica utilizando grandes volúmenes de diesel como combustible, así como los racionamientos y cortes permanentes de energía, que se registraban en determinadas épocas del año, particularmente en la temporada de lluvias, interrumpiendo las actividades productivas e incluso de servicios de la región”, dijo el gerente general de ENDE, Ra fael Alarcón.
En Trinidad y en San Ignacio de Moxos, la energía suministrada por la línea de transmisión es distribuida por las respectivas empresas locales, mientras que en Yucumo y San Borja la tarea estará a cargo de ENDE. En todos los casos, las tarifas son económicas y fueron determinadas por la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Electricidad (AE).
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